Nelson Mandela fue un ejemplo a seguir y un referente en la lucha por la justicia y la igualdad de Sudáfrica. Trabajó y peleó durante toda su vida para derrocar las leyes del apartheid y por ello fue arrestado y encarcelado durante 27 años. Cuando salió de prisión se convirtió en el primer presidente negro de su país y un año después ganó el Premio Nobel de la Paz. Si quieres saber más sobre quién fue, qué hizo y cómo es Sudáfrica después de Mandela, ¡nosotros te lo contamos!
¿Quién fue Mandela?
Nelson Mandela, también conocido como «Madiba» o «Rolihlahla Mandela», nació en 1918 en Mvezo, una aldea situada al sureste de Sudáfrica, entre Durban y Port Elizabeth. Pronto se trasladó a Johannesburgo para estudiar derecho, y fue allí donde poco a poco se fueron forjando los ideales políticos que le llevarían a convertirse en el líder y portavoz de la lucha contra las políticas racistas de Sudáfrica. Pero, ¿cuáles fueron los acontecimientos de la época?
En 1948 ganó las elecciones de Sudáfrica el Partido Nacional (PN), cuyo programa electoral incluía leyes relacionadas con la segregación racial que fueron llevadas a cabo a lo largo de los años cincuenta. La oposición, liderada por el Congreso Nacional Africano (ANC), rechazaba las medidas y en 1960 la tensión estalló en un conflicto que dejó 68 muertos y más de cien heridos. Como consecuencia, el partido en el Gobierno ilegalizó toda organización negra, incluido el ANC.
A pesar de ello, Nelson Mandela y el resto de líderes del ANC no cesaron en su lucha y, durante una manifestación de 1963, Mandela fue arrestado y encarcelado. Fue llevado a Robben Island por supuesta traición al gobierno, pero esto no le detuvo y siguió peleando desde prisión.
La presión internacional exigiendo su liberación, así como el rechazo a su encarcelación y a las leyes del apartheid dentro del país, hicieron que finalmente fuera liberado en 1990, 27 años después. A partir de ese momento, comenzó a liderar un importante cambio de gobierno y, junto con Frederik de Klerck, presidente de Sudáfrica durante aquellos años, consiguió acabar con el apartheid en Sudáfrica. En 1994 se celebraron las primeras elecciones democráticas sin distinción de raza y Mandela fue elegido presidente, convirtiéndose así en el primer presidente negro de Sudáfrica.
Mandela fue durante aquellos años un símbolo de resistencia contra el Gobierno de Sudáfrica y a favor del fin del apartheid. Fue el activista sudafricano más influyente en la lucha contra la segregación racial, llevó a cabo políticas conciliadoras con el resto de partidos políticos, creó la primera Constitución de Sudáfrica y ayudó económicamente a la mejora de la calidad de vida de los sudafricanos negros.
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Sudáfrica antes y después del Apartheid
Sudáfrica fue hasta los años noventa un país colonizado y dirigido por británicos, quienes establecieron medidas políticas a favor de su propia colonia marginando por completo a los sudafricanos negros y mestizos. La llegada al poder del Partido Nacional supuso el comienzo del apartheid en Sudáfrica, donde el 80% de población negra se vio gravemente afectados por las enormes desigualdades que se estaban permitiendo. Sin embargo, la situación de Sudáfrica después de Nelson Mandela es muy diferente.
El PIB anual de Sudáfrica en estos últimos veinte años ha ido aumentando progresivamente hasta llegar a un PIB de aproximadamente 309.109 millones de euros en el año 2017, según el banco mundial. En 1985, cuando todavía existía el apartheid, el PIB sudafricano apenas llegaba a los 61.000 euros. Por lo que respecta al salario mínimo, se introdujo por primera vez a principios de 2019 y es de R3500, unos 244 euros al mes para las jornadas de 40 horas semanales.
Por lo que respecta a la legislación, la Constitución de Sudáfrica fue creada en 1996 por el ANC y supuso el cambio más importante en relación con los derechos de los sudafricanos negros. Significó el fin del apartheid legalmente y reconoce la igualdad de todos los ciudadanos sin tener en cuenta su color de piel.
Gracias a esta Constitución, aumentó el nivel de inscripciones a la escuela primaria y universitaria, aunque a día de hoy se sigue percibiendo la diferencia racial en el sistema educativo en Sudáfrica. Los altos costes de la universidad, que oscilaban entre los 1800 y 3500 euros aproximadamente en 2015, suponen una barrera para la educación superior en Sudáfrica. En Meraki Bay trabajamos precisamente por esto, para evitar que las desigualdades estructurales del país limiten a las generaciones futuras. Nuestro objetivo es incentivar a los niños y niñas que acuden cada día a nuestros talleres a través de diferentes tipos de actividades y charlas; sin embargo, no podemos hacerlo solos.
Tipo de gobierno de Sudáfrica
Hasta el año 1994, debido a la situación de segregación racial, los sudafricanos negros no podían participar en las elecciones. Este hecho suponía una grave situación de desigualdad, de opresión y de ausencia de derechos humanos y limitaba enormemente la posibilidad de un cambio.
Después del Gobierno de Nelson Mandela, Sudáfrica se convirtió en un país democrático, liderado por el congreso nacional africano (ANC), multipartidario y con un sistema parlamentario similar al sistema británico anterior. Sin embargo, en 1999, Mandela decidió dejar la presidencia de Sudáfrica y pasó a tomar el poder Thabo Mbeki hasta 2008. A partir de este año lideró el partido el actual presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma. Como ves, hay un cambio notable entre Sudáfrica antes y después de Mandela, pero todavía queda mucho por hacer. Las leyes del apartheid han sido suprimidas, pero el GINI de Sudáfrica, el medidor que se utiliza para conocer la desigualdad dentro de un país, sigue siendo muy elevado, ¡la labor de Meraki Bay es muy importante!